Reyes Magos 2018: juegos para el aula

Hola a todos. ¿Qué tal la primera semana de clase tras las fiestas navideñas? Nosotros comenzando con fuerza el segundo trimestre del curso. Y cómo no, lo primero que hicieron mis alumnos el lunes, al llegar a clase, fue comprobar si los Reyes Magos habían recibido nuestra carta y nos habían traído lo que habíamos pedido: algún juego para el aula. ¡Y sí! ¡Parece que sí que la recibieron porque nos encontramos dos paquetes en nuestro rincón de lectura!


Hicimos un sorteo para seleccionar a los alumnos que abrirían los regalos, y los afortunados fueron Jim y Sofía. No tardaron en desvelar el misterio: ¡S.S.M.M. Los Reyes Magos nos habían dejado dos juegos para el aula!



TIC TAC BOUM


El primero de ellos se llama Tic Tac Boum. Dentro de la caja encontramos:
- Un cronómetro con forma de bomba con una duración aleatoria entre 20 y 90 segundos (eso le da emoción extra, ya que nunca sabes cúando va a explotar).
- Cartas con diferentes sílabas.
- Dado especial con las palabras "tic", "tac" y "boum".
- Manual de instrucciones.


El funcionamiento no puede ser más sencillo. Primero se lanza el dado:

- Tic: los jugadores tienen que decir palabras que empiecen por las letras que salgan en la carta.
- Tac: los jugadores tienen que decir palabras que acaben por las letras que salgan en la carta.
- Boum: los jugadores tienen que decir palabras que contengan las letras que salgan en la carta, cualquiera que sea su posición.

Luego se gira una carta y se enciende la bomba. El primer jugador tiene que decir una palabra con las consignas dadas y rápidamente pasar la bomba al siguiente jugador, que dirá otra palabra con las mismas consignas y nuevamente pasar la bomba, y así hasta que explote. Obviamente, pierde el jugador al que le estalla la bomba en las manos por lo que, cuanto más rápido encuentres la palabra que necesitas, menos posibilidades de que te estalle la bomba en las manos. Veamos un ejemplo:

Si sale "tic" y la sílaba "ba" los jugadores tienen que decir palabras que empiecen por ba: balón, banda, bandera, balda... Parece fácil, pero os aseguro que a los más pequeños les cuesta bastante, aunque cuanto más juegan, ¡más palabras encuentran! Por eso, al jugar con niños, es recomendable no tener en cuenta la ortografía sino el sonido, y si sale "ba" también es posible aceptar palabras que empiecen por "va". Por supuesto, también les admito todos los derivados, porque así el juego es mucho más rico y dinámico. Si un jugador dice "barco", luego se puede decir "barca", "barcos", "barcas", "barquito", "barquita", "barquitos", "barquitas"... Por otro lado, si sale la sílaba "li" y "boum", aceptaríamos, por ejemplo, "gallina" o "biblioteca". En secundaria, en cambio, exigiría palabras en las que las letras de la tarjeta fueran una sílaba completa. Siguiendo con los ejemplos anteriores, si tiene que empezar por "ba" no aceptaría "barca" ni "banda", puesto que también puede haber tarjetas con "bar" o "ban"; ni tampoco admitiría "gallina" o "biblioteca" sino únicamente la sílaba "li" dentro de la palabra. Pero ya os digo que yo juego con niños y niñas de 7 años y ya resulta suficientemente difícil para ellos poniendo todas las facilidades posibles (de hecho, selecciono las tarjetas y retiro aquellas más difíciles). Dicho esto, repito que, cuanto más juegan, más fácilmente encuentran nuevas palabras en otras rondas (y echan mano de derivadas y conjugaciones verbales ¡que da gusto!).



DOBBLE


El segundo juego con el que nos obsequiaron S.S.M.M. Los Reyes Magos se llama Dobble. Dobble es un juego de 55 cartas con 8 símbolos por carta y con solamente un símbolo idéntico entre cada una de las cartas. En una pequeña caja metálica encontramos las cartas y las reglas del juego.


Se puede jugar de muchas maneras, pero todas tienen algo en común: se trata de encontrar el símbolo idéntico entre las cartas e ir acumulándolas o deshaciéndote de ellas. Las instrucciones nos proponen 5 mini-juegos, aunque los jugadores decidirán si siempre quieren jugar al mismo, o a dos de ellos, o hacer ronda de mini-juegos tipo torneo... ¡Todo vale! La cuestión aquí es trabajar la discriminación visual, la atención ¡y la rapidez!


  • MINI-JUEGO Nº1: La Torre Infernal. Se barajan las cartas y se reparte una carta boca abajo a cada jugador. Se forma una torre en el centro de la mesa con el resto de las cartas boca arriba. Todos los jugadores ponen su carta boca arriba a la vez y tienen que buscar el símbolo idéntico entre su carta y la primera carta de la torre. El primer jugador que lo consigue, nombra el símbolo en voz alta, coge la carta de la torre y la pone sobre su carta (importante). De esta manera, habrá una nueva carta de referencia sobre la torre y vuelta a empezar. El juego acaba cuando no queden más cartas en la torre y el ganador será el jugador que haya conseguido más cartas.
  • MINI-JUEGO Nº2: El Foso. Viene a ser a la inversa del anterior. Se reparten todas las cartas entre todos los jugadores y se dejan boca abajo, formando cada uno una torre. Se deja la última carta boca arriba en el centro de la mesa. Todos los jugadores giran su torre a la vez y tienen que buscar el símbolo idéntico entre su carta y la del centro de la mesa. El primer jugador que lo encuentra, nombra el símbolo en voz alta y deja su carta sobre la del centro de la mesa. Esta será la nueva carta de referencia y vuelta a empezar. El ganador será el primer jugador que consiga deshacerse de todas sus cartas.
  • MINI-JUEGO Nº3: La patata caliente. ¿Qué queremos hacer con una patata caliente? ¡Quitárnolas cuanto antes de nuestras manos porque quema! Pues eso es lo que tendremos que hacer en este mini-juego. En cada ronda se reparte una carta a cada jugador, dejándola boca abajo, y reservando las restantes al lado para las siguientes rondas. Los jugadores muestran sus cartas a la vez, en la palma de su mano, de manera que todas las cartas sean visibles a todos los jugadores. En cuanto un jugador encuentre un símbolo idéntico entre su carta y la de cualquier otro jugador, lo nombra en voz alta y pone su carta sobre la de la mano de su adversario (deshaciéndose así de su patata caliente). Este jugador "ya se ha salvado" y continuan los jugadores restantes haciendo lo mismo, intentando pasar su patata caliente a otro jugador. El jugador que tiene varias cartas sobre su mano (porque ya le han pasado alguna patata caliente), si encuentra el símbolo idéntico de su carta superior con la de otro jugador, le pasa todas las cartas a la vez. Aquí no hay ganador, sino perdedor, que será quien se quede en su mano con las cartas del resto de jugadores. Este mini-juego es más divertido cuantos más jugadores haya.
  • MINI-JUEGO Nº4: ¡A por todas! En cada ronda se pone una carta boca arriba en el centro de la mesa. Después, se colocan alrededor de la carta del centro tantas cartas como jugadores haya. Se reservan el resto de cartas para las siguientes rondas. En este caso no hay una carta por jugador, sino que todas las cartas son de todos. Cada jugador da la vuelta, a la vez, a una de las cartas comunes que rodean a la carta central. Esta vez los jugadores tienen que encontrar el símbolo idéntico entre la carta del centro y cualquiera de las cartas que la rodean. En cuanto un jugador lo encuentra, lo nombra en voz alta, coge la carta y la deja a su lado. ¡Ojo! ¡No se puede llevar la del centro! Cuando sólo quede la carta central, se coloca bajo el mazo de las cartas restantes y se empieza una nueva ronda. Ganará el jugador que haya conseguido más cartas.
  • MINI-JUEGO Nº5: "El regalo envenenado". Viene a ser a la inversa del anterior. Se reparte una carta boca abajo a cada jugador. Se forma un mazo con el resto de las cartas y se pone boca arriba en el centro de la mesa. Todos los jugadores ponen su carta boca arriba a la vez y tienen que encontrar el símbolo idéntico entre la carta del centro y la de cualquiera de sus adversarios. El primer jugador que lo encuentre, lo nombra en voz alta, roba la carta central y la pone sobre la carta del jugador en cuestión (le da un regalo envenenado, jeje). La partida continúa hasta que no queden cartas en el centro y, naturalmente gana quien acabe la partida con menos cartas.

¿Os parecen divertidos estos mini-juegos? ¡Os aseguro que lo son, y mucho! Dobble es un juego muy, muy dinámico y divertido. ¡Las risas están aseguradas! Y lo mejor, si os animáis en casa, es que podéis jugar toda la familia. En este caso, los mayores no siempre lo hacen mejor que los peques, jeje.

Aquí tenéis a mis alumnos en clase estrenando los nuevos juegos.


¿Conocíais estos juegos? Espero que mis alumnos se diviertan mucho con ellos a la vez que entrenan algunas habilidades 😉

                
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